Elige tu momento para competir, pero no te dejes llevar por los impulsos de tu estado de forma:
Después de pasar el ecuador del verano y con ello de la temporada, nuestra mirada y pensamiento inconscientemente se van fijando en el final de la temporada. Se trata éste de un momento en el que nuestro físico está en muy buen momento, si hemos empezado la temporada en abril o mayo. En este momento y después de hacer ya unas cuantas competiciones, en el que seguramente alguna de ellas ha sido nuestro objetivo de la temporada, es cuando buscamos alguna carrera más para rematar la temporada.
Bien, pues aquí es donde tiene que entrar la lógica y hacer mucho caso al entrenador, pero sobre todo tenemos que “Entrenar la fuerza de voluntad”, ya que aunque nuestro cuerpo siga pidiendo guerra y se sigan teniendo muchas ganas de competir… la temporada puede hacerse interminable si no se lleva adecuadamente. Sobre todo si no tenemos prudencia y hacemos las cosas de forma anárquica. Y se escuchan palabras y frases que todos estamos cansados de oír: “se me está haciendo la temporada larguísima”
Siempre digo a mis chicos cuando llega este momento, que no se pasen con los entrenos, se que se hace difícil levantar el pie cuando tu cuerpo responde, pero es importante saber que los descansos entre sesiones son igual
de importantes o más que un entreno de calidad.
Por eso, es necesario y tenemos que tener mucho cuidado en varios aspectos:
Hacer las carreras que teníamos planeadas sin variar mucho el calendario.
No hacer de un día para otro la típica carrera que se celebra en el pueblo en el que estamos de vacaciones, poniendo la escusa que nos sirve como entrenamiento. Pues No, es mejor planear la semana de forma global, seguir lo que teníamos marcado y si hacemos alguna carrera tener muy en cuenta los momentos de descanso previo y posterior.
No pasarnos en los entrenamientos y hacer mas de los que nos toca.
hay veces que en verano tenemos más tiempo y solemos doblar sesiones. Pues tampoco, hay veces como en estos casos que hacer de mas es menos: “nos resta” y si queremos llegar bien y con garantías a final de temporada, (octubre o noviembre) deberemos limitar el número de competiciones y el volumen e intensidad de los entrenos.
Visto esto es interesante saber cómo afrontar los entrenamientos, todo dependerá de la carga que lleves en los meses previos y de las competiciones que hayamos hecho pero por lo general y como yo planteo estos meses a mis chicos es insistiéndoles en varios aspectos a la hora de entrenar:
1. Poniendo entrenos que nos sean tan metódicos, es decir combinar días de series con días de fartleck por sensaciones, o en vez de marcarles series por distancia, hacer cambios de ritmo por tiempo.
2. Combinar días de carrera continua con días de bici para descargar y dar un respiro a las
piernas.
3. Meter chispas de intensidad al final de cada entrenamiento, que no sean muy intensas y prolongadas, ya que lo interesante ahora es simplemente mantener el tono y prorrogar el declive que inevitablemente llegara al final de temporada.
4. Introducir ritmos controlados con mayor tiempo de recuperación: ahora nos interesa mantener nuestra forma lo máximo posible, buscar supercompensaciones o incrementar la forma, harán que nos pasemos de rosca y no lleguemos al final de temporada o lo que es peor, podremos sobre entrenarnos y lesionarnos.
Conclusión:
No compitas todas las semanas, establece un orden con cabeza, haz caso al entrenador, no intentes hacer más de lo que te toca, se prudente, entrena para mantenerte y sobre todo disfruta hasta final de Temporada.
Articulo publicado en la revista Nº5 de Sense Limits Aventura
http://senselimitsaventura.com/