Personalmente creo que en este tipo de carreras (las carreras de montaña) resulta muy interesante saber a lo que nos vamos a enfrentar. Todas las carreras de montaña son distintas y cada una tiene su desnivel y su perfil, de ahí su peculiaridad y realmente lo especial de este deporte, no corremos por un tartán ni por asfalto, subimos y bajamos montañas de mayor o menor altitud, y todas y cada una de ellas son distintas. Por lo que calcular los tiempos de paso y dosificar mejor los esfuerzos en carrera se hace muy complicado, un buen estudio previo de estas características, hará que corramos con mayor garantía y con la seguridad de terminar en mejores condiciones, sobre todo para la gente que se inicia y no ha corrido por mucho por montaña y necesita unas pautas y saber leer el perfil de cada prueba.
No es lo mismo una carrera por montaña en la costa, con desniveles cortos y explosivos, que una carrera en pirineos o picos con grandes sistemas montañosos y con subidas y bajadas muy técnicas en las que estamos más expuestos. Por eso una lectura previa de lo que nos vamos a encontrar, facilitará enormemente nuestra gestión de carrera, y por eso te aconsejo detenerte unos minutos a estudiar el perfil y sus características. Ahora os paso a exponer los 5
factores principales que debemos de saber y tener muy en cuenta:
En función de lo que subamos o bajemos en unos ciertos kilómetros deberemos de tener en cuenta la hidratación y nutrición de cada tramo hasta el próximo punto de avituallamiento.
Como ejemplo. En un maratón de montaña, si a mitad de carrera salvamos un desnivel de 1000m+, en una subida prolongada de 10km, debemos de calcular según nuestra forma física que vamos a estar subiendo aproximadamente sobre los 60′-90′. Por lo tanto deberemos de tomar dependiendo de nuestro desgaste físico una mayor o menor cantidad de líquidos, sales y sólidos. Calcular ese tiempo que dedicaremos a pasar cualquier subida o bajada hará que sepamos la cantidad más aproximada a transportar e ingerir.
de forma independiente es importante, sobre el global del kilometraje y desnivel de cada prueba, es recomendable hacer una planificación de cada tramo pero a la vez de los totales. Pongo el ejemplo de un maratón, con 42km y 2500m+, donde nos encontramos con 3 subidas bien diferenciadas, aquí lo más lógico sería dividir en 3 partes o tramos,(aunque habría que ver su tecnicidad) y saber dosificar nuestros esfuerzos y alimentación en función de la altura de carrera en la que nos encontramos, es decir en la primera subida en el km 5 de carrera, en la que vamos más frescos, solemos beber menos que en la tercera subida del km 30, esto es un error común que pagaremos al final de carrera. La alimentación es mejor que sea equitativa
y regular, ir bebiendo a poquitos. En esos tres sectores debes de controlar el tiempo aproximado por su desnivel. Y saber que comer en cada sector es cuestión de hacer pruebas en los entrenamientos con esos mismos desniveles y comer lo que nos siente bien. Sándwich, barritas, frutos secos o por contras los geles si el tramo es más corto y explosivo. Así como bebida isotónica y agua casi siempre.
En este tipo de carreras podemos estar corriendo tanto a 200m sobre el nivel del mar o pasar varias horas por encima de los 2000m de altura donde hay déficit de oxígeno y donde estamos más expuestos, consumimos más energía y por lo tanto hay que cuidar mucho más esa hidratación. Hacerte un esquema de estos pasos de altura, collados, barrancos etc., es muy importante para saber el tiempo que estaremos cresteando o el tiempo que estaremos más en zonas más bajas y protegidas.
Es decir puede estar en un collado, o en un alto donde este muy desprotegido y lleguemos fríos por el viento, o por el contrario está en un barranco más protegido con más calor y humedad, esto hay que tenerlo presente para saber que comer en cada punto. Personalmente y lo que intento transmitir a mis chicos, es que consuman el alimento sólido en las zonas más bajas o protegidas o justo antes de que vallan a afrontar una larga subida, y por contra en los altos y sitios más a la intemperie donde nos disponemos a bajar más rápido y sin casi tregua. Además de que estamos más expuestos al frío en la tripa, viento etc., hay que tomar cosas más ligeras, tipo geles o barritas, que no nos den problemas digestivos ni pesadez para que no nos vaya rebotando en la tripa o que por la climatología y nuestro estado de esfuerzo no se digieran del todo bien. Por lo tanto en los puntos de avituallamiento en zonas bajas tomarte más tiempo y comer algo más contundente y en las zonas altas y desprotegidas algo más liviano y rápido…
para saber si es una carrera rápida o por contra saber si hay mucha zona técnica y será una carrera de más horas, saber el tiempo máximo que estaremos ascendiendo, el tiempo que estaremos más o menos expuestos, las bajadas largas o por el contrario más cortas y técnicas, esto también es muy importante para saber que material llevar, si una mochila o una riñonera, saber también cuanta cantidad de líquido y comida transportar hasta el próximo punto de control. Si llevamos más a mano un cortavientos, o si debemos de poner un gel más en el bolsillo por si acaso. Etc… Como conclusión y espero que os haya ayudado todo esto, creo que es importante una buena planificación de tomas y material dependiendo de nuestro perfil de carrera. ¿De qué nos sirve entrenar a diario si el día de la carrera lo dejamos todo al azar? Sólo quiero decir que esto es parte del juego y parte del entrenamiento. Todo suma y si tenemos estas cosas atadas estaremos más tranquilos y confiados durante la carrera.
1 Comment
Hola David. Muy interesante tu artículo. Estoy de acuerdo en que es necesario planificar la estrategia en esos términos. Para mí es fundamental el tema de la nutrición que cuando paso de 40 km me da problemas siempre. Un abrazo.